Desde La Miel en tu radio te compartimos que concluyó con éxito el curso de apicultura organizado por el INTA-PROAPI y la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) INTA Alto Valle, un programa que reunió a personas de diversas localidades del Alto Valle de Río Negro y Neuquén. Desde su inicio en abril de este año, esta iniciativa se consolidó como un espacio de aprendizaje, fortalecimiento de redes y desarrollo de capacidades técnicas y prácticas en apicultura.
Este curso no solo capacitó a nuevos apicultores, sino que también puso en evidencia el poder de la colaboración entre instituciones públicas, privadas y municipales para impulsar actividades productivas que promuevan el desarrollo sostenible en la región.
Un espacio de encuentro para el Alto Valle
La convocatoria atrajo a participantes de localidades como Neuquén, Centenario, Campo Grande, Cipolletti, Fernández Oro, Allen, General Roca y Cinco Saltos, reflejando el interés creciente por la apicultura como actividad productiva en el Alto Valle.
Durante el año, los asistentes tuvieron la oportunidad de formarse en aspectos teóricos y prácticos fundamentales para la producción apícola, abordando temas como:
- Manejo de colmenas.
- Producción de miel y otros productos de la colmena.
- Buenas prácticas agrícolas.
- Cuidado del ambiente y sostenibilidad de los ecosistemas.
El curso no solo se centró en aspectos técnicos, sino que también destacó la importancia de la apicultura como motor de desarrollo local, promoviendo el empleo genuino y el valor agregado en la región.
Cierre del curso: reconocimiento y proyección
El evento de clausura fue una jornada cargada de emociones, marcada por la entrega de certificados a los participantes que completaron satisfactoriamente las instancias de formación. En una ceremonia sencilla pero significativa, se reconoció el esfuerzo y dedicación de los asistentes, quienes compartieron reflexiones sobre la experiencia vivida a lo largo del año.
Entre las autoridades presentes se destacaron:
- Pablo Mariguan, Director de Gestión Ambiental del Municipio de Allen.
- Guillermo Grosvald, socio gerente de la Cooperativa de Apicultores del Comahue.
- Ing. Agr. Silvina Garrido, coordinadora de Investigación de la EEA INTA Alto Valle.
Un momento especial fue el reconocimiento al Técnico Agrícola Denis Cruz, representante de la Cooperativa de Apicultores del Comahue, quien desempeñó un papel clave como formador durante el curso. Cruz destacó la importancia de la actividad apícola como generadora de empleo y promotora de emprendimientos locales, subrayando el impacto positivo que esta tiene en la calidad de vida de las comunidades.
Colaboración interinstitucional: Clave del éxito
El curso en Allen es un ejemplo claro de cómo la colaboración entre distintas instituciones puede generar beneficios significativos para la región. Entre los organizadores y colaboradores se encuentran:
- INTA-PROAPI: Programa referente de INTA dedicado a la promoción de la apicultura como actividad estratégica para el desarrollo sostenible.
- Cooperativa de Apicultores del Comahue: Actor clave en la articulación con los productores locales y en la formación técnica.
- Municipio de Allen: Aportando recursos y logística para garantizar el éxito del curso.
La sinergia entre estas entidades permitió no solo la formación de nuevos apicultores, sino también la generación de espacios de intercambio, innovación y proyección para la actividad apícola en el Alto Valle.
Apicultura: una actividad con impacto social y económico
La apicultura no solo representa una fuente de ingresos para los productores locales, sino que también contribuye de manera significativa a la sostenibilidad ambiental y la biodiversidad. Algunos de los beneficios destacados incluyen:
- Polinización: Las abejas son esenciales para la polinización de cultivos, lo que impacta directamente en la productividad agrícola.
- Diversificación económica: Permite a las familias rurales diversificar sus ingresos, mejorando su estabilidad financiera.
- Producción sustentable: Promueve prácticas amigables con el ambiente, esenciales en un contexto de cambio climático.
El futuro de la capacitación en apicultura
Uno de los anuncios más importantes realizados durante el cierre fue que, a partir del próximo año, la Cooperativa de Apicultores del Comahue asumirá la responsabilidad de organizar y gestionar el curso, con el respaldo técnico del INTA y otras instituciones vinculadas a la actividad.
Esta decisión asegura la continuidad del programa, a la vez que fortalece la autonomía de la cooperativa como actor central en la formación y desarrollo de apicultores en la región.
Reflexiones de los protagonistas
Durante el acto de cierre, varios participantes y autoridades compartieron reflexiones sobre el impacto del curso:
- Denis Cruz: “La apicultura no es solo una actividad económica, es una forma de generar empleo genuino y valor agregado. Pero, sobre todo, es una herramienta para mejorar la calidad de vida de las familias del Alto Valle”.
- Guillermo Grosvald: “La Cooperativa de Apicultores del Comahue siempre ha apostado por la formación y el trabajo en red. Este curso es una muestra de lo que se puede lograr cuando las instituciones trabajan juntas”.
- Silvina Garrido: “Desde el INTA, reafirmamos nuestro compromiso de seguir apoyando estas iniciativas, que son fundamentales para el desarrollo local y la sostenibilidad de la región”.
Proyecciones para el sector apícola en el Alto Valle
La apicultura en el Alto Valle tiene un futuro prometedor, respaldado por:
- Creciente interés en productos apícolas: La demanda de miel y derivados, tanto en el mercado local como internacional, sigue en aumento.
- Innovación tecnológica: La incorporación de nuevas herramientas y técnicas promete mejorar la eficiencia y productividad de los apicultores.
- Apoyo institucional: Con iniciativas como este curso, se fortalece el compromiso de las instituciones para impulsar el sector.
Además, el Alto Valle tiene condiciones agroecológicas ideales para el desarrollo de la apicultura, lo que lo posiciona como una región estratégica para esta actividad.
Conclusión: un año de logros y nuevos retos
El curso de apicultura en Allen ha dejado un aprendizaje en los participantes y en la comunidad local. Más allá de los conocimientos adquiridos, este programa ha fortalecido las redes de colaboración, empoderado a los apicultores y puesto en valor una actividad clave para el desarrollo sostenible del Alto Valle.
El desafío ahora es mantener el impulso, expandir las oportunidades de capacitación y garantizar que la apicultura siga siendo un motor de desarrollo económico y social en la región.
Más información:
- Salvador San Gregorio, INTA Alto Valle: sangregorio.salvador@inta.gob.ar